Uno de los productos más utilizados para formulaciones de uso industrial son los biocidas, que contienen sustancias especiales para actuar contra bacterias y microorganismos causantes de plagas. Hoy te contaremos las aplicaciones más comunes de los biocidas y los beneficios que tienen para las industrias, acompáñanos a conocerlos.
¿Qué son los biocidas?
Los biocidas son sustancias activas, o mezclas de sustancias, que cuentan con propiedades fisicoquímicas o biológicas cuyo efecto es antimicrobiano, por lo que pueden neutralizar, disminuir o mantener bajo control la carga de microorganismos patógenos en formulaciones utilizadas en diversas aplicaciones, tanto industriales, como del entorno hospitalario y doméstico.
El uso de los biocidas, a bajas concentraciones y durante el tiempo suficiente de contacto, puede controlar los microorganismos nocivos mediante una acción física. La mayoría de los biocidas actúa sobre las moléculas de membrana en células vivas, especialmente sobre lípidos, proteínas, ácidos nucleicos, minerales, hormonas y otros elementos que se encuentran en las células. En general, estos compuestos varían en su estructura química y en el mecanismo de acción en los diferentes tipos de microorganismos, e incluso en las diferentes cepas de una misma especie.
Clasificación de los biocidas
En general, los biocidas se dividen en 22 tipos; y, con base en su uso, se clasifican en cuatro grupos:
- Desinfectantes. En este grupo encontramos a los biocidas para higiene humana; desinfectantes y alguicidas destinados a aplicación directa a personas y animales; biocidas para higiene veterinaria; desinfectantes para utensilios, recipientes y superficies que están en contacto con alimentos; y desinfectantes para agua potable.
- Conservantes. Aquí encontramos a los conservantes para películas, maderas, productos en almacenamiento, de materiales de construcción, fibras, polímeros, líquidos para refrigeración, productos antifúngicos y para líquidos utilizados para cortar materiales.
- Plaguicidas. Estos biocidas son utilizados para el control de plagas, como rodenticidas, vermicidas, avicidas, molusquicidas, piscicidas, insecticidas, acaricidas, repelentes y control de artrópodos y otros animales vertebrados.
- Otros. En esta clasificación se encuentran los líquidos para embalsamamiento, productos antiincrustantes y conservantes para alimentos o piensos.
Los biocidas en las pinturas
Sin duda, las superficies como paredes o techos son susceptibles al crecimiento de bacterias, algas u hongos, especialmente en lugares como cocinas, baños y exteriores, que se encuentran bajo condiciones como cambios de temperatura, humedad y poca luz, que son el entorno favorito de diversos microorganismos, los cuales pueden degradar la pintura y recubrimientos, provocándoles pérdida de eficiencia y una imagen desagradable.
Los biocidas juegan un papel muy importante como preservantes de las pinturas. Son un aditivo fundamental para evitar el crecimiento de hongos, bacterias, algas y otros microorganismos presentes en las superficies donde se aplican las pinturas. Estos biocidas tienen un componente químico para erradicar a los microorganismos, pero en concentraciones tan bajas que no son tóxicos ni dañinos para seres humanos y animales de compañía.
Tipos de biocidas para pinturas
- Protección in can. Es un tipo de biocida que se utiliza como conservador para las pinturas; es decir, al comprar una lata de pintura y no usarla toda, se tapa y guarda, y cuando se vuelve a requerir se encontrará en óptimas condiciones gracias a los biocidas ya que no crecerán hongos ni bacterias que la degraden y le hagan perder color.
- Dry film. Son los biocidas integrados en la película seca o aplicada, son ingredientes que se activan en la superficie ya recubierta para evitar que ingresen agentes externos que dañen la pintura una vez aplicada, como hongos, bacterias o algas.
En general, todas las pinturas tienen biocidas de tipo in can para preservarlas en condiciones óptimas antes de ser abiertas, y después de que se usaron y se guardó un sobrante. Sin embargo no todas las pinturas tienen en la película seca, ya que no siempre son necesarias en las aplicaciones al interior.
Las pinturas con conservación dry film son una buena opción para aplicar en zonas donde se sufre constantemente del ataque de estos microorganismos, como la cocina o el baño, para lo cual se recomienda retirar la pintura o recubrimiento anterior, sanitizar la zona y aplicar la pintura con biocida. Los productos para impermeabilizar techos y muros son otros productos que contienen biocidas para evitar que crezcan microorganismos y repeler el agua.
Los biocidas más usados en pinturas y productos base agua son:
- Bactericidas. Se usan como aditivos in can, ya que la pintura por sí mismo es un medio de cultivo de bacterias y se debe evitar que se formen colonias bacterianas, especialmente durante el almacenamiento. El cloruro de benzalconio es ejemplo de este tipo de biocidas.
- Fungicidas y alguicidas. Se usan para prevenir la formación de hongos en lugares donde proliferan debido a una humedad permanente, tanto en el sustrato como en el recubrimiento. Los biocidas antihongos deben ser poco solubles en agua, de baja toxicidad y volatilidad para que sean duraderos.
- Insecticidas. Se utilizan para evitar la formación de larvas de insectos en las pinturas.
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